A todos nos queda más que claro que un auto convertible es sexy y divertido; pasear en un convertible con la capota abajo es toda una experiencia que deberíamos de hacer una vez en la vida.
Pero más allá de pasarla bien, la capota protege el interior del auto en los días en que el clima no es tan apropiado para transitar con ella abajo. La capota puede ser de vinil o de tela, pero en ambos casos tenemos que darle mantenimiento frecuente, aún más que la misma carrocería; por esa razón te compartimos estos 3 elementos clave para que tu capote dure mucho más tiempo.
- Límpiala una vez por semana con un cepillo de cerdas suaves, así podrás remover el polvo o pelusa que este adherida; también es importante quitar a la brevedad posible todo excremento de pájaro que pudiera caerle.
- Después de cepillarla, si aún tienes tiempo y quieres hacer una limpieza más profunda es recomendable lavarla a presión con un champú descontaminante líquido neutro, esto ayudará a encapsular y remover la suciedad que este impregnada; de esta manera, nos aseguramos de que toda la mugre y moho ha sido removida sin ser agresivos con el material.
- Una vez limpia es altamente recomendable protegerla con algún producto especial ya sea para vinil o textil; hay diferentes marcas en el mercado que ofrecen una buena protección, pregunta en la tienda automotriz de tu preferencia.
Las capotas de vinilo duraran más tiempo si la proteges desde el principio. Una vez dañada no hay mucho que pueda hacerse para restaurarla. El cuidado adecuado del vinilo es tan simple como lavar semanalmente con un champú neutro, limpiezas mensuales con un limpiador de capotas de vinilo y la aplicación mensual de un protector.
Las capotas de tela se tratan químicamente durante la fabricación para repeler el agua y la contaminación, pero estos productos químicos disminuyen a medida que pasa el tiempo. Exactamente cuánto tiempo durará el repelente de fábrica depende del uso y el medio ambiente, por lo que es mejor vigilar su parte superior. Los lavados regulares reducen gradualmente la repelencia al agua. Esté atento a los signos de charcos de agua o puntos húmedos donde el agua ha penetrado claramente en la tela. Si ve alguna de estas señales, es hora de tratar su parte superior con productos especializados.
En la Clínica del Brillo contamos con la experiencia profesional y los productos de calidad para cuidar de tu convertible. Si necesitas alguna asesoría, valoración o tienes dudas, puedes contactarnos, con gusto te ayudaremos.
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